La equinácea , un miembro de la familia del girasol también conocida como equinácea purpúrea, es un importante medicamento utilizado ampliamente para tratar los resfriados, la gripe, la bronquitis, y todo tipo de infecciones.
Esta planta fue utilizada por los nativos americanos y adoptado por los primeros colonos como una medicina. En la profesión médica de la América primitiva se basaba en gran medida en los beneficios de la equinácea, pero cayó en desuso con la llegada de la industria farmacéutica y los antibióticos. Pese a esto, muchos médicos están redescubriendo los beneficios de la equinácea a día de hoy.
Utilizado durante mucho tiempo para tratar enfermedades infecciosas y aumentar el sistema inmune, el extracto de echinacea también sirve para ayudar a tratar la gripe, resfriados, síndrome de fatiga crónica y el SIDA.
Diversas investigaciones han demostrado que la equinácea estimula la función inmune natural del cuerpo, y lo hace mediante el aumento de la actividad de las células blancas de la sangre, aumenta los niveles de interferón, y estimulas las céluas fagocíticas de la sangre para eliminar los microbios invasores.
Echinacea también aumenta la producción de sustancias que el cuerpo produce de forma natural para combatir el cáncer y las enfermedades.
Además de su uso como un estimulante inmunológico, la equinácea se recomienda para las personas con lesiones cutáneas recurrentes, tales como forúnculos, y como tónico para mejorar la capacidad del hígado para reducir los efectos de las toxinas ambientales.
Para la infección resfriado o una gripe aguda : Tome 1 cucharadita de tintura cada 1-3 horas, o de 1-2 cápsulas cada 2-3 horas el primer y segundo día. Después reducir la dosis a 2 cucharaditas de tintura o 6 cápsulas por día.
